¡¡Feliz Navidad y buen año 2010!!

Queridos amigos en el Señor, junto a Nora les deseamos lo mejor. Esperamos haber sido útiles al Movimiento de esta Diócesis de San Rafael.
Por cualquier necesidad de datos, cuenten con nosotros.

Un gran abrazo en Cristo y María.

DECOLORES!!!!!!!!!!!

Boletín OMCC Junio - 2009

Queridos Amigos, 04, jun, 09 - spa

¡Que la paz y el amor de Nuestro Señor estén siempre con ustedes!

I. Eventos de Actualidad

En solo dos meses, si Dios quiere, estaremos celebrando nuestra IV Ultreya Mundial de Anaheim, California el día 1 de agosto de 2009. Les queremos recordar que necesitan comprar sus boletos porque el día de la Ultreya no se venderán en la puerta. El Comite Ejecutivo del OMCC sigue trabajando amorosamente y con mucho entusiasmo en la Organización de esta IV Ultreya Mundial y les seguimos pidiendo que la sigan promoviendo en sus comunidades y no olvidemos que es una oportunidad única para poder vivir y convivir lo fundamental cristiano con amigos de todo el mundo. Es solo la IV Ultreya Mundial en la historia del Movimiento de Cursillos de Cristiandad, que cada día esta en mas países y ciudades del mundo entero. Unamos en este magno evento para darle gracias a Dios por este gran Carisma que el Espíritu Santo dio al mundo para conocer el amor y la amistad de Dios en Cristo Jesús.

En el mes de mayo, Juan Ruiz visitó la Isla del Encanto - Puerto Rico. Y durante su visita con Monseñor Eusebio Ramos Morales, Obispo de la nueva Diócesis de Fajardo-Humaco, se obtuvo la bendición con dos manos, como un día lo haría el mismo Obispo Hervás, para empezar los Cursillos de Cristiandad en esa nueva Diócesis.

Durante esta visita a la Isla del Encanto, también tuvo la oportunidad de visitar la Casa de Cursillos de Aguas Buenas, donde estaba marchando un Cursillos de hombres y la Casa de Cursillos de Juncos. Así como también, participar en un Encuentro Nacional con líderes de las 6 Diócesis de Puerto Rico, la Primera Ultreya Inter-diocesana en Humacao y la Clausura del Cursillo que se celebrara en la Casa de Cursillo de Aguas Buenas. Como resultado de esta visita, muchos dirigentes expresaron la necesidad de tener más eventos Inter-diocesanos, de un Cursillo de Cursillo para las 6 Diócesis y de re-avivar el Secretariado Nacional para que Puerto Rico vuelva a ser una voz en este Movimiento Universal.

De todos y cada uno de estos eventos, lo mas impresionante fue la entrega y dedicación de los Dirigentes del Movimiento de Cursillo de Cristiandad y el trabajo incansable que el P. Jaime Capó realizó en esta bella Isla del Caribe.

También durante este mes de mayo, Juan Ruiz también tuvo el gran honor y privilegio de celebrar el 50 Aniversario del Movimiento de Cursillo en la Arquidiócesis de Guadalajara Jalisco, participando juntamente con cuatro nuestro Asesor Episcopal - Cardenal Juan Sandoval Iñiguez, en un Cursillo de Cursillo en esta Arquidiócesis donde asistieron cursillistas, laicos y sacerdotes, de siete diferentes diócesis de México.
Le damos gracias a Dios por todas estas oportunidades que nos está brindando para llevar el mensaje de este bello Carisma a tantos y tantos amigos de tantos y tan diferentes culturas y lenguajes. Todo esto solo viene a confirmar una vez más la mano del Espíritu Santo en la creación y efectividad de transmitir ese mensaje del amor y la amistad de Dios en Cristo Jesús, a través de ese simple vehículo de la amistad, a tantos y tantos alejados en el mundo.

II. Estudio del Carisma: Parte IX

Metodología II: CURSILLO (3 DÍAS)

Ningún hombre, ninguna mujer se conoce mientras no se ha encontrado con Dios.

El cursillo es un curso abreviado e intenso de tres días de oración, de estudio y de convivencia.

El cursillo es, ante todo, la vivencia de lo fundamental cristiano, en convivencia caritativa y apostólica. En el cursillo se convive con Dios, por la oración, con la Iglesia a través de los dirigentes y con el mundo, con los demás cursillistas. El cursillo es el hallazgo de la propuesta de “Ven y verás”, que el padrino hizo al aspirante. La realidad del triple encuentro con uno mismo, con Cristo y con los hermanos.

El método de Cursillos no surgió al azar, ni fue producto de laboratorio, ni la consecuencia de una exaltación emocional. El método del cursillo, en la peculiar convivencia durante tres días, en régimen cerrado y aislado, fue rezado, pensado, planeado, estudiado y estructurado minuciosamente. La convivencia durante tres días fue vivida y experimentada durante cinco años, desde Cala Figuera, alcanzando la plenitud en el cursillo de San Honorato.

Un sistema novedoso, dentro de la metodología, en cuanto a la introversión en el yo íntimo y la conexión con el Espíritu. Sistema que ha merecido los mejores elogios de grandes innovadores en la educación, como Guillermo Estarellas, así como de especialistas en psicología, muchos de ellos “alejados” de la Iglesia.

Se indicó que en el Método de Cursillos de vivir y alumbrar amistad se distinguen tres tiempos, o tres elementos básicos: el Precursillo, el Cursillo y el Postcursillo.

Estos tres elementos, como planos que se establecen en las relaciones de amistad entre las personas, se unen íntimamente entre sí, como un movimiento circular. Esta circunvalación al unísono, viene provocada porque el precursillo genera el cursillo, el cursillo genera el postcursillo y, a su vez, el postcursillo genera el precursillo.

La unión íntima de estos tres elementos del Método se concreta en que el cursillo es la finalidad del precursillo y, a su vez, el precursillo es una labor y objetivo del postcursillo. Cada uno de los tres tiene una importancia igual, dentro del Método, sin que deba ni hacerse ni darse comparación de importancia entre los mismos.

El CURSILLO es el segundo tiempo del Movimiento de Cursillos. Este tiempo no es una espiritualidad, sino un método para posibilitar cualquier espiritualidad, para posibilitar lo espiritual auténtico, como se indica en Vertebración de Ideas. Corresponde al plano de interrelación, o sea, el de las relaciones con quienes nos acompañan en la vida, nuestros compañeros, prójimos o próximos; expresa la proximidad sin identificación.

Es un plan apostólico con el objetivo ÚNICO de aproximación de la persona para que quien vive los tres días del cursillo pueda tener un triple encuentro: con él mismo, con Cristo y con los hermanos.

Este itinerario de encuentros es la trayectoria secuencial de los rollos seglares del cursillo:

"El hombre puede ser más y mejor (Rollo Ideal),
puede serlo donde está (Seglar en la Iglesia)
si descubre su corazón, con espontaneidad (Piedad),
si asume su inteligencia con convicción (Estudio),
si orbita su voluntad con decisión (Acción)
y su persona en su globalidad (Dirigentes);
si acepta que su realidad está integrada por personas (Estudio del ambiente)
a las que puede ayudar (Cristiandad en acción),
siempre que se realice de una forma personal (Cursillista más allá del cursillo)
en amistad (Reunión de Grupo y Ultreya)".
(Cursillos de Cristiandad. Manifiesto)

Ningún hombre, ninguna mujer se conoce mientras no se ha encontrado con Dios. Y el cursillo es un vehículo para acercarse a Dios; es un vehículo que provoca el encuentro con Dios.

El cursillo, desde el método de Cursillos de Cristiandad, es una reunión de hombres o una reunión de mujeres, en régimen cerrado y aislados de su vida cotidiana durante tres días, en los que se intenta explicar las ideas necesarias sobre la realidad de ser cristiano desde la vivencia de los fundamental cristiano, dándolas a conocer con alguna posibilidad de eficacia a través de un método de testimonio y palabra, en un ambiente de amistad.

Se pretende la conversión de la persona, para que ésta provoque la conversión del círculo social humano que le rodea en su metro cuadrado móvil en el que vive. Esto se consigue, desde la gracia de Dios y la libre opción de la persona, por la proclamación del mensaje y el conocimiento de la psicología y la metodología usadas, a través de un equipo formado por dirigentes seglares y sacerdotes y la palanca que representa la oración de toda la comunidad.

Los 3 días de Cursillos, sirviéndose de los rollos y los contactos personales de sondeo, estoque y animación, se dirigen esencialmente a conseguir un íntimo triple encuentro de personas con inquietud de encontrar el gozo de la fe. Mediante los rollos místicos se pretende provocar hambre de la vida en Gracia. Mediante los rollos seglares se pretende ofrecer testimonios vivos de que es posible la realidad de que el hombre y la mujer pueden llevar una vida en Gracia en el mundo donde el Señor les ha puesto, en su concreto mundo familiar, laboral y de ocio.

En primer lugar, se pretende que la persona que asiste a un cursillo se vea a sí mismo, como es.

Que sepa si realmente dirige su vida hacia donde quiere, que se descubra a sí mismo y que acepte sus capacidades y limitaciones para vivir y convivir en amistad. Si el encuentro consigo mismo no se produce no se pueden dar los otros encuentros porque no parte de su realidad verdadera.

El segundo paso ofrece al cursillista el planteamiento de la posibilidad de una vida con Cristo.

Pasar de un Cristo lejano y olvidado para la mayoría de los hombres y mujeres de nuestro tiempo, a un Cristo vivo, normal y cercano.

La esencia del tercer día estriba en hacer consciente al cursillista de que todo ello, la vida en Gracia y la cercanía de Cristo, es una realidad posible al regresar a los ambientes en el mundo nuestro. Una realidad posible, viviéndola entre las personas con las que frecuentamos directamente y, también, con las que nos rodean en general. Una realidad posible sostenible, testimoniando cristianismo.

Los pasos del cursillos, no obstante, no son una fórmula matemática que se desarrolla de forma sucesiva y exacta en cada uno de los asistentes. Los rollos y las meditaciones de cada uno de los tres días están orientados a provocar cauces apropiados para adentrase en los tres campos. Pero cada persona, en el descubrimiento de la luz de su fe, reacciona a los impactos en su momento y en su día. Dentro de los tres días del cursillo se presentan numerosos detalles, con valor suficiente cada uno en concreto para poder ser el detonador que active en el cursillista el encuentro con lo fundamental cristiano: la oración, el Sagrario, las palancas, la alegría, la amistad….

En palabras de Eduardo Bonnín, "los cursillos, por su misma naturaleza, han de ir al fondo de la persona, a lo más interior e íntimo de sí misma, no a sus circunstancias concretas que le envuelven, si es casado, soltero, practicante o indiferente etc.. No tiene que haber nada que le desvíe de la diana a que se debe apuntar. El encuentro tiene que ser con Cristo y la persona, cara a cara, de tú a tú y a eso tiene que ir enfocado todo; la existencia inevitable de un magnetismo de género o la presencia condicionante de algún testigo cualificado por relación profesional, familiar o de pareja, lo imposibilita. La reacción tiene que ser personal, radical y auténtica. No tiene que haber nada que impida o dificulte esta radicalidad, perplejidad y entusiasmo, que causa en la persona el CREER de verdad y en serio que Cristo le ama. Como en el cursillo se descubre una nueva dimensión mucho más profunda que la fe normal, no es la misma cuando la persona es observada por otra que está pendiente de su reacción. Por esta razón los cursillos no deben ser mixtos (hombres y mujeres juntos), así como tampoco no es de ninguna manera conveniente que vayan a un mismo cursillo juntos padre e hijo, madre e hija o dos hermanos o hermanas, o Jefes y subordinados o un matrimonio. Si van mujeres y hombres juntos, ninguno se porta como se portaría si fueran por separado. Cristo busca a la persona, no a lo que le envuelve". (Mi Testamento Espiritual - Eduardo Bonnín Aguiló)

La misma orientación queda ratificada por el P. Jordi Girau: “…como es bien sabido desde siempre en Cursillos, la franqueza y profundidad de comunicación que se da entre cursillistas del mismo sexo favorece la eficacia, la intensidad y el fruto del cursillo.” (PROA nº 1. pág. 6. Enero 2002. Secretariado Diocesano de Cursillos de Cristiandad de Madrid.)

El método del cursillo no es un camino cualquiera, sino que ha sido pensado meditado rezado y experimentado. El cursillo tiene que ser fiel al método, aplicar los distintos recursos del mismo sabiendo el por qué, el para qué y el cómo de ellos. Todo esto, que es tan sencillo y claro y que ha dado tan buenos frutos en tantas personas, cambiando para bien sus vidas, haciéndolas más cristianas y más humanas, no se ha de tergiversar con el deseo de actualizarlo o ponerlo al día, ni por la originalidad de añadir cosas innecesarias, que no harán más que complicar la santa simplicidad de lo pretendido, como dijo y repitió Eduardo.

La pretensión de aplicar el método del cursillo, abreviando la duración del mismo, destinado solo a determinadas edades y mezclando hombres y mujeres, será un “algo”, será un algo muy bueno, será lo que sea, pero nunca será un cursillo bajo el método de los Cursillos de Cristiandad.

Como siempre, nos despedimos rogándole a Nuestro Señor que nos mantenga unidos en su amor y amistad.

De Colores,

Juan Ruiz
Presidente – OMCC
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III. Una nota de nuestro Asesor Espiritual

A medida que continuamos este estudio del carisma del Movimiento de Cursillos, creo que es necesario tener en cuenta que nuestro compromiso a lo siguiente:

1) la integridad del método ( "ortodoxia")
2) la autenticidad de nuestro testimonio ( "arthopraxis") en las 3 fases garantiza la autenticidad del movimiento.

Integro a la autenticidad del Movimiento de Cursillos es la introducción de los "3 encuentros" y el ofrecimiento de los medios para crecer progresivamente en estos encuentros que se presentan durante los 3 días del Cursillo. No sólo se presentan los 3 encuentros, sino que se viven en un clima de amistad. Juan Ruiz nos ha recordado que el objetivo del fin de semana de Cursillo es que "todos los que vivan los 3 días del Cursillo puedan tener un triple encuentro con uno mismo, con Cristo, y con nuestros hermanos (o hermanas)".

A pesar de que el primer encuentro con uno mismo, es el crítico punto de partida, va de la mano con el segundo encuentro, es decir, con Dios en Jesucristo. Juan claramente (y correctamente), declaró que "nadie puede conocerse a él mismo, a menos que él o ella tiene un encuentro con Dios". Sin estos 2 primeros encuentros, el tercer encuentro, con los demás, sería menos que auténtico. Juan observó, en efecto, que la novedad del método del Cursillo está en facilitar el encuentro con lo más profundo, y auténtico de sí mismo y luego enlazarse con el Espíritu de Dios.

En releer la primera encíclica del Papa Juan Pablo II, "Redemptor hominis", me sorprendió observar la resonancia con la comprensión de Cursillo sobre la importancia de los "3 encuentros" (especialmente en los primeros 2). Citando el Concilio Vaticano II "Gaudium et Spes" (# 22), afirma que " el misterio del hombre sólo se esclarece en el misterio del Verbo encarnado.... Cristo el Señor, el nuevo Adán ... en la misma revelación del misterio del Padre y de su amor, manifiesta plenamente al propio hombre y le descubre la sublimidad de su vocación. "(Redemptor Hominis) # 8).

El Santo Padre continúa: " El hombre no puede vivir sin amor. Él permanece para sí mismo un ser incomprensible, su vida está privada de sentido si no se le revela el amor, si no se encuentra con el amor, si no lo experimenta y lo hace propio, si no participa en él vivamente.. ... Este es el motivo por que el Redentor " plenamente el hombre al mismo hombre". Una frase de Santa Teresa de Lisieux viene a la mente, "Vine a dar me cuenta que mi vocación es el Amor".

Es Jesús quien revela al Padre de amor a nosotros, y es Jesús y el Espíritu Santo que nos revelan a nosotros mismos. "Nadie conoce al Padre, sino el Hijo, y cualquier persona a quien el Hijo le quiera revelar" (Mateo 11:27). "Quien me ha visto a mí, ha visto al Padre" (Juan 14:9). "Este es el Hijo ... representación exacta del ser del Padre" (Hebreos 1:3). El Papa Juan Pablo II destacó que " En esta Palabra definitiva de su revelación, Dios se ha dado a conocer del modo más completo; ha dicho a la humanidad quién es. " (Redemptor Missio # 5).

En el fin de semana del Cursillo, el encuentro con uno mismo favorece el encuentro con y en Cristo y la vida con y en El. Los primeros 2 encuentros implican necesariamente el 3er encuentro, con los demás. El centro de atención del último día del Cursillo es habilitar que nos apropiemos de lo que hemos vivido en el Cursillo para nuestra vida cotidiana. Los Cursillos en su conjunto nos despierta a nuestra hambre de amistad con nosotros mismos, con Dios, y con los demás.

El domingo anterior a Pentecostés (que acabamos de celebrar) el 24 de mayo de 2009, El Papa Benedicto XVI dio a conocer su mensaje para la cuarto-decima tercera Jornada Mundial de las Comunicaciones. Me gustaría citar de ella extensivamente.

(Hay) "un deseo fundamental en las personas para comunicarse y relacionarse con los demás.

Este deseo de comunicación y la amistad se basa en nuestra propia naturaleza como seres humanos ... debe considerarse principalmente como un reflejo de nuestra participación en el Amor de Dios comunicativo y unificador, que desea hacer de toda la humanidad una sola familia ". (Podemos ver en el que se hace eco de los acontecimientos de Pentecostés) ... Cuando nos encontramos atraídos hacia otras personas ... estamos respondiendo a la llamada de Dios, una llamada que está impreso en nuestra naturaleza como seres creados a imagen y semejanza de Dios, el Dios de la comunión y de la comunicación ... cuando nos abrimos a los demás, estamos cumpliendo nuestra más profunda necesidad de ir siendo cada vez más plenamente humanos".

Papa Benedicto XVI continúa, " En nuestras amistades, y a través de ellas, crecemos y nos desarrollamos como seres humanos. Precisamente por eso, siempre se ha considerado la verdadera amistad como una de las riquezas más grandes que puede tener el ser humano. Por tanto, se ha de tener cuidado de no banalizar el concepto y la experiencia de la amistad. Sería una pena que nuestro deseo de establecer y desarrollar las amistades en linea fuera en deterioro de nuestra disponibilidad para la familia, los vecinos y quienes encontramos en nuestra realidad cotidiana, en el lugar de trabajo, en la escuela o en el tiempo libre. En efecto, cuando el deseo de conexión virtual se convierte en obsesivo, la consecuencia es que la persona se aísla, interrumpiendo su interacción social real. Esto termina por alterar también los ritmos de reposo, de silencio y de reflexión necesarios para un sano desarrollo humano”. Creo que Cursillos es más necesario que nunca, como un antídoto para la soledad de "relaciones-ciber " que no cumplen con la arraigada necesidad de la auto revelación en una amistad auténtica. De lo contrario, nos quedamos con una caricatura de la amistad. El Cursillo es una intensa experiencia de la amistad por medio de los 3 encuentros.

La esencia de la antropología de Cursillos se encuentra en los rollos de "Ideal" y "Gracia Habitual"--el encuentro entre el humano y lo divino. Este "diálogo" se continúa a lo largo de los 3 días. Esto también se refleja en Redemptor Hominis (# 10) por Papa Juan Pablo II, "El hombre que quiere comprenderse hasta el fondo a sí mismo —no solamente según criterios y medidas del propio ser inmediatos, parciales, a veces superficiales e incluso aparentes— debe, con su inquietud, incertidumbre e incluso con su debilidad y pecaminoso, con su vida y con su muerte,acercarse a Cristo. Debe “apropiarse” y asimilar toda la realidad de la Encarnación para encontrarse a sí mismo... En realidad, ese profundo estupor respecto al valor y a la dignidad del hombre se llama Evangelio, es decir, Buena Nueva".

Esto nos lleva de nuevo al tercer encuentro y su realización en el Postcursillo. Juan Ruiz señaló que "lo que el Cursillo pretende es inducir a la transformación social y humana de los de los que se encuentran en "el metro cuadrado movible" (medio ambiente) en el que vivimos. El imagen que me viene a la mente es la de una bola de nieve rodando cuesta abajo, ganando impulso y masa. El movimiento de Cursillos es "la bola de nieve humana". Es instructivo volver al mensaje del Día de Comunicadores del Papa Benedicto: " Haceos cargo con entusiasmo del anuncio del Evangelio a vuestros coetáneos. Vosotros conocéis sus temores y sus esperanzas, sus entusiasmos y sus desilusiones. El don más valioso que les podéis ofrecer es compartir con ellos la "buena noticia" de un Dios que se hizo hombre, padeció, murió y resucitó para salvar a la humanidad".

En lo que respecta a las fases o "períodos" del Movimiento de Cursillos, Juan observó que cada una de las 3 son igualmente importantes dentro del movimiento. "El Precursillo genera los Cursillos, que generan el Postcursillo, que, a su vez, genera el Precursillo.

Trato de imaginármelo en esta forma:



Noten las flechas que indican movimiento. Somos el movimiento de Cursillos, no el Cursillo "estacionario". El movimiento es el empoderamiento fermento del "metro cuadrado movible" de cada cursillista. Si el "círculo" de Cursillo se convierte en "menos circular", es decir, si un elemento se convierte en exagerado o insuficiente en relación con los demás, el movimiento se ve comprometido, si no completamente frustrado.

Una última observación ...

Si el Cursillo ha de ser afectivo, el testimonio de los líderes (en las 3 fases), debe ser auténtico.

Muy rápidamente en las semanas y meses después de mi Cursillo en 1976, me desilusioné con los dirigentes de mi Cursillo. Nunca vi jamás a más de dos terceras partes de los dirigentes del Cursillo que viví, ni en Ultreyas, Clausuras, o cualquier otra reunión de Cursillos. Además, he trabajado muy cerca del lugar de trabajo del rollista más destacado de mi Cursillo. Un mes después de mi Cursillo me acerqué a él, ya que estaba protestando fuera de su empresa que estaba en huelga. Él me maldijo y me amenazó con la violencia. Si no fuera por los miembros de mi reunión de grupo, hubiera despedido los Cursillos como un fraude.

Repitiendo el comienzo de estas reflexiones, es sólo a través de un compromiso sincero a la integridad del movimiento y de la autenticidad de nuestro testimonio que garantizará la autenticidad del movimiento.

De Colores,

P. David Smith
Asesor Espiritual – OMCC